Pensamientos luego de la escucha de "Lark's tongues in aspic", de la serie "King Crimson 40th Anniversary Series" (13 cds)
¿Porque los músicos de rock sinfónico no enloquecieron?¿Porque lo progresivo no tiene un solo mártir?
Peter Hammill es el que escapa a la regla.
¿Es Rick Wakeman una suerte de maldito en el género? (por lo borracho)
Syd Barrett sería el otro punto (aunque en verdad, pertenece a los 60s)
¿Es el rock sinfónico, respecto del rock de los 60s, un signo de derrota, una vuelta al hogar con los brazos caídos, luego del fallido sueño del 68?
Los músicos vivos aún, de los 70s, no son sobrevivientes: son personas normales y adaptadas, envejecen suavemente.
En cambio, los de los 60s, sobreviven y se les nota. Un razgo de locura indómita, resquebraja por momentos sus trapos de momia.
En Argentina nunca hubo respeto por la música, por ende, tampoco hacia los músicos, y mucho menos por el oyente.
Cuando digo nunca, digo AHORA TAMPOCO.
Es de la única forma que puedo entender el desinterés frente hacia nuestra historia musical, por parte del empresariado arjo.
La retromanía internacional nos inunda con el reflujo de un pasado fértil, con reediciones, remasterizaciones, bonus-track y merchandising variopinto de grupos o solistas seminales (o no) de la historia. Crea de esta forma un mercado eterno, de futuro dentro del pasado y una estética anclada en ese paradigma.
La pregunta ¿hacia donde iremos mañana?, ya no significa ¿que nos deparará la tecnología en relación con el futuro?. El viaje al pasado es un continuum, donde el mercado interviene con la manipulación técnica y el desempolvado y/o maquillado de aquella parte sobrante de la historia.
Algo similar al congelamiento de Walt Disney.
En nuestro país, en cambio, esto no sucede.
Entiendo que el atractivo comercial del producto local, es pobre en relación al internacional.
Las "King Crimson 40th Anniversary Series" se vendió en todo el mundo, pero no creo que si alguien, acá hiciera un trabajo similar con "Anabelas", de Bubu, suceda lo mismo.Tampoco lo lograría con Seru Girán o Pescado rabioso. El mercado argentino es pobre.
Y los empresarios también lo son, pero de ideas y sobre todo, pobres en coraje. Siempre apuestan riesgo cero.
Una mierda.
http://www.youtube.com/watch?v=KOI98e-MqEw
miércoles, 23 de octubre de 2013
lunes, 30 de septiembre de 2013
Animales en Wikipedia
Definitivamente, el disco que más me gusta de Pink Floyd es "Animals".
Lo compré ni bien salió, en aquella edición nacional de CBS. La placa sonaba bastante bien, su prensado era digno, en una pasta como "maleable" (no era quebradiza).
La tapa (doble), tenía un arte enigmático y casi urgente, de algún futuro tremendo quizás, con un presente intoxicado. Al menos, para un apocalíptico como yo, eso representaba. Creo era de Hipgnosis, una empresa cotizando en aquella época; también había en el interior, un sobre negro, con fotografías muy mal impresas, y las letras, no recuerdo bien si estaban.
Luego de "Wish you were here", esta gente se tomó un descanso como de dos años, y, en medio de la irrupción de esa furia punk, volvieron con algo mucho más arriesgado en lo musical que sus predecesores, "Dark side of the moon" y el citado WYWH.
Aquel mundo abstracto y espacial se tornó más terreno y denso, mucha furia en medio de dos canciones, a modo de entrada y cierre, preanunciando una forma que luego utilizarían en "The wall".
Un dato importante creo, es que aquí, prevalece la voz de Waters, y más que nunca, noto la diferencia entre él y Gilmour, éste encarnando la parte bella, y el otro, lo extraño, lo alienado.
A falta de bibliografía, busco en Wikipedia y encuentro esto:
”(...)Con la excepción de "Dogs", coescrita por Gilmour, las cinco pistas fueron compuestas por Roger Waters. "Pigs On the Wing" se dividió en dos partes, y ya que las regalías se calculaban por canción, Waters recibiría más dinero que Gilmour, a pesar de que "Dogs" ocupa casi toda la primera cara del álbum. La canción contiene referencias a la vida privada de Waters — su nuevo interés romántico era Carolyne Anne Christie (casada con Rock Scully, mánager de Grateful Dead). Gilmour también se distrajo con el nacimiento de su primer hijo y contribuyó poco hacia el final del proceso de grabación. De igual manera, ni Mason ni Wright contribuyeron mucho en Animals, en comparación con álbumes anteriores. Animals es el primer álbum de la banda que no cuenta con ninguna canción compuesta por Wright. A pesar de no tener contribuciones tan notables como en Wish You Were Here, se nota claramente su influencia en los arreglos, que incluyen solos en "Dogs" y "Sheep".
“Lo de Roger es dominar, pero yo me contento con defenderme y discutir a voces sobre los méritos en las diferentes piezas musicales, que es lo que hice en Animals. No me sentí ni remotamente desplazado del álbum. El noventa por ciento de la canción "Dogs" es mío. Esa canción es casi toda la primera cara, así que es la mitad de Animals.”
David Gilmour, Mojo (2008)
La banda había discutido sobre contratar a otro guitarrista para las siguientes giras, por lo cual invitaron a Snowy White al estudio. Después de que Waters y Mason borraran sin querer un solo de guitarra que había terminado Gilmour, le pidieron a White que grabase un solo de guitarra para "Pigs on the Wing", que aunque no aparece en el lanzamiento en LP, sí se incluyó en la versión cartucho 8-track del álbum. También participó en la gira de promoción de Animals. Mason recuerda haber disfrutado más en este álbum que en el anterior Wish You Were Here.(...) (1)
Busco el full álbum en Youtube, y noto que cuando pongo play en el sitio, aparece un botón rojo indicándome que "Este vídeo incluye contenido de EMI, que lo ha bloqueado en tu país por motivos de derechos de copyright. Disculpa las molestias."
Afortunadamente soy propietario de un cd con dudosa procedencia, es ruso creo, o sea, puedo estar escuchándolo ahora, por quinta vez en el día mientras escribo. Y mi disco es tan solo una copia, permitida en otro país y traída aquí de contrabando. Curioso...
El disco arranca con "Pigs on the wing, part one", una canción simple, áspera, bien al estilo PF-canción, casi simétrica, como parábola.
Luego sigue "Dogs", una guitarra acústica y el órgano, viniendo desde lejos, con mucho espacio, dando pié a la voz de Gilmour que toma el discurso, erigiéndose en líder absoluto del tema.
Éste, se desarrolla casi de forma abstracta, pero el bueno de David, tiene ya jugado su papel de héroe y, al rato de casi morir, en medio de sonidos como de animales solitarios y moribundos provenientes del deformado sonido synthe de Wright, nos regresa a la calidez de su guitarra, rearmando el tema para culminar cabizbajos (como es Gilmour), pero arriba. Una épica floydeana que dura 17 minutos.
Así culminaba el lado "A" del disco.
En este trabajo, Pink Floyd retoma una estructura usada en común con otros grupos de la época, denominada forma sonata, y que ellos ya habían utilizado en "Meddle". Al respecto, dice Wiki:
“(...) La definición habitual se centra en la organización temática y armónica de los materiales tonales, que se presentan en la exposición, son elaborados y contrastados en el desarrollo y luego resueltos armónica y temáticamente en la re-exposición o recapitulación. Además, esta definición admite que una introducción y una coda pueden estar presentes. Cada una de las secciones a veces es dividida o caracterizada de una manera particular para que cumple su función en la forma.(...)“(2).
Al comienzo de la canción se plantea un tema como motivo por el que avanza el discurso sonoro, para luego proseguir con una especie de puente como informe, que desarrollándose, llega a un punto intensísimo, como de ruptura, donde los músicos retoman la forma-canción planteada al comienzo y, creciendo en intensidad, llegan al fin.
Lo extraño es esta suerte de metafísica, situada en el medio, en la cual se crea la pista para el desarrollo de solos y efectos.
El lado B es puramente Waters, arrancando a la Lennon en "Pigs (three different ones)". Es el tema más rockero del disco, con la crudeza característica de la voz de Roger, mucho más gastado aquí que en años anteriores.
"Sheep" vuelve con la estructura del sinfonismo anteriormente citada y, en su coda (o puente) escuchamos unos muy raros sonidos y, el balar de ovejas al final, para desembocar en "Pigs on the wing, part 2", a modo de cierre, como si Roger (o su narrador) terminara con lo que inició al comienzo del disco.
No tengo otra cosa para mostrar, que mi propia subjetividad; la impresión de aquel momento, recordada desde hoy. Para lo otro está Wikipedia.
Notas:
(1): http://es.wikipedia.org/wiki/Animals_(%C3%A1lbum)
(2): http://es.wikipedia.org/wiki/Rock_sinf%C3%B3nico
Lo compré ni bien salió, en aquella edición nacional de CBS. La placa sonaba bastante bien, su prensado era digno, en una pasta como "maleable" (no era quebradiza).
La tapa (doble), tenía un arte enigmático y casi urgente, de algún futuro tremendo quizás, con un presente intoxicado. Al menos, para un apocalíptico como yo, eso representaba. Creo era de Hipgnosis, una empresa cotizando en aquella época; también había en el interior, un sobre negro, con fotografías muy mal impresas, y las letras, no recuerdo bien si estaban.
Luego de "Wish you were here", esta gente se tomó un descanso como de dos años, y, en medio de la irrupción de esa furia punk, volvieron con algo mucho más arriesgado en lo musical que sus predecesores, "Dark side of the moon" y el citado WYWH.
Aquel mundo abstracto y espacial se tornó más terreno y denso, mucha furia en medio de dos canciones, a modo de entrada y cierre, preanunciando una forma que luego utilizarían en "The wall".
Un dato importante creo, es que aquí, prevalece la voz de Waters, y más que nunca, noto la diferencia entre él y Gilmour, éste encarnando la parte bella, y el otro, lo extraño, lo alienado.
A falta de bibliografía, busco en Wikipedia y encuentro esto:
”(...)Con la excepción de "Dogs", coescrita por Gilmour, las cinco pistas fueron compuestas por Roger Waters. "Pigs On the Wing" se dividió en dos partes, y ya que las regalías se calculaban por canción, Waters recibiría más dinero que Gilmour, a pesar de que "Dogs" ocupa casi toda la primera cara del álbum. La canción contiene referencias a la vida privada de Waters — su nuevo interés romántico era Carolyne Anne Christie (casada con Rock Scully, mánager de Grateful Dead). Gilmour también se distrajo con el nacimiento de su primer hijo y contribuyó poco hacia el final del proceso de grabación. De igual manera, ni Mason ni Wright contribuyeron mucho en Animals, en comparación con álbumes anteriores. Animals es el primer álbum de la banda que no cuenta con ninguna canción compuesta por Wright. A pesar de no tener contribuciones tan notables como en Wish You Were Here, se nota claramente su influencia en los arreglos, que incluyen solos en "Dogs" y "Sheep".
“Lo de Roger es dominar, pero yo me contento con defenderme y discutir a voces sobre los méritos en las diferentes piezas musicales, que es lo que hice en Animals. No me sentí ni remotamente desplazado del álbum. El noventa por ciento de la canción "Dogs" es mío. Esa canción es casi toda la primera cara, así que es la mitad de Animals.”
David Gilmour, Mojo (2008)
La banda había discutido sobre contratar a otro guitarrista para las siguientes giras, por lo cual invitaron a Snowy White al estudio. Después de que Waters y Mason borraran sin querer un solo de guitarra que había terminado Gilmour, le pidieron a White que grabase un solo de guitarra para "Pigs on the Wing", que aunque no aparece en el lanzamiento en LP, sí se incluyó en la versión cartucho 8-track del álbum. También participó en la gira de promoción de Animals. Mason recuerda haber disfrutado más en este álbum que en el anterior Wish You Were Here.(...) (1)
Busco el full álbum en Youtube, y noto que cuando pongo play en el sitio, aparece un botón rojo indicándome que "Este vídeo incluye contenido de EMI, que lo ha bloqueado en tu país por motivos de derechos de copyright. Disculpa las molestias."
Afortunadamente soy propietario de un cd con dudosa procedencia, es ruso creo, o sea, puedo estar escuchándolo ahora, por quinta vez en el día mientras escribo. Y mi disco es tan solo una copia, permitida en otro país y traída aquí de contrabando. Curioso...
El disco arranca con "Pigs on the wing, part one", una canción simple, áspera, bien al estilo PF-canción, casi simétrica, como parábola.
Luego sigue "Dogs", una guitarra acústica y el órgano, viniendo desde lejos, con mucho espacio, dando pié a la voz de Gilmour que toma el discurso, erigiéndose en líder absoluto del tema.
Éste, se desarrolla casi de forma abstracta, pero el bueno de David, tiene ya jugado su papel de héroe y, al rato de casi morir, en medio de sonidos como de animales solitarios y moribundos provenientes del deformado sonido synthe de Wright, nos regresa a la calidez de su guitarra, rearmando el tema para culminar cabizbajos (como es Gilmour), pero arriba. Una épica floydeana que dura 17 minutos.
Así culminaba el lado "A" del disco.
En este trabajo, Pink Floyd retoma una estructura usada en común con otros grupos de la época, denominada forma sonata, y que ellos ya habían utilizado en "Meddle". Al respecto, dice Wiki:
“(...) La definición habitual se centra en la organización temática y armónica de los materiales tonales, que se presentan en la exposición, son elaborados y contrastados en el desarrollo y luego resueltos armónica y temáticamente en la re-exposición o recapitulación. Además, esta definición admite que una introducción y una coda pueden estar presentes. Cada una de las secciones a veces es dividida o caracterizada de una manera particular para que cumple su función en la forma.(...)“(2).
Al comienzo de la canción se plantea un tema como motivo por el que avanza el discurso sonoro, para luego proseguir con una especie de puente como informe, que desarrollándose, llega a un punto intensísimo, como de ruptura, donde los músicos retoman la forma-canción planteada al comienzo y, creciendo en intensidad, llegan al fin.
Lo extraño es esta suerte de metafísica, situada en el medio, en la cual se crea la pista para el desarrollo de solos y efectos.
El lado B es puramente Waters, arrancando a la Lennon en "Pigs (three different ones)". Es el tema más rockero del disco, con la crudeza característica de la voz de Roger, mucho más gastado aquí que en años anteriores.
"Sheep" vuelve con la estructura del sinfonismo anteriormente citada y, en su coda (o puente) escuchamos unos muy raros sonidos y, el balar de ovejas al final, para desembocar en "Pigs on the wing, part 2", a modo de cierre, como si Roger (o su narrador) terminara con lo que inició al comienzo del disco.
No tengo otra cosa para mostrar, que mi propia subjetividad; la impresión de aquel momento, recordada desde hoy. Para lo otro está Wikipedia.
Notas:
(1): http://es.wikipedia.org/wiki/Animals_(%C3%A1lbum)
(2): http://es.wikipedia.org/wiki/Rock_sinf%C3%B3nico
domingo, 9 de diciembre de 2012
La transmisión del elefante
Bueno, desisto de bajar "Bridge of sighs" de Robin Trower; me encuentro googleando, con más de veinte blogs que albergaban el zip de los archivos, pero están censurados ya. Basta, mi memoria es grande y puedo recurrir a mi propia colección e ir a por otra cosa.
Es curioso, pero tengo la sensación de haber vivido esto como cuando era chico, investigaba mucho en la radio, incluso en onda corta, a la pesca de algo que deseaba y, cuya instancia final era siempre su obtención.
La diferencia radica, creo, en aquello que buscaba era, por aquél entonces, nuevo, por venir...
Ahora busco aquello mismo, lo que nunca llegó, pero ya no es nuevo, está archivado...
También puedo comprarlo y creer que tengo el sonido...
Claro, puedo reproducirlo quizá casi eternamente, pero, ¿alguna vez lo tuve?
¿se puede tener el sonido?
¿es así que la música dejó de ser lenguaje para transformarse en documento, en discurso, luego digitalizado, junto al que deambulé por la ciudad?
Sí, la tecnología y no la técnica, cada vez nos aleja más del otro. Por maś que lo tengamos al lado, siempre está la máquina de por medio.
Lo anterior es solo recuerdo.
Parafraseando a LAS, diría "yo quiero ver un elefante"...
jueves, 6 de diciembre de 2012
Notas a Retromanía
El libro Retromanìa, de Simon Reynolds, publicado por Caja Negra, adolece de graves problemas a la hora de ser considerado una fuente de informaciòn seria. Tiene muchìsima data, pero nunca se cita la fuente. No sè si el mismo, en su publicaciòn original (Faber & Faber, 2011), la incluye. En todo caso, me parece un notable descuido en la ediciòn. Èste inportante trabajo de Reynolds podrìa cobrar una mayor gravitaciòn si alguien se hubiese encargado de editarlo, que no solo significa contar con una buena traducciòn, una estètica acorde al contenido y al cometido del mensaje de la editorial, sino tambièn, por ejemplo, un ìndice analìtico, quizas un onomàstico, bibliografìa, etc., etc., que lo diferencie del formato libro de rock.
En definitiva, el resultado es como una inmensa revista en formato libro, para ser acomodado en la biblioteca de mùsica.
Acabo de comprobar que la ediciòn original de Faber & Faber cuenta con un ìndice onomàstico y tambien bibliografìa. ¿cuànto papel ahorrò Caja Negra con èste recorte?
http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/pop-cayo-agujero-negro_0_707329272.html
jueves, 15 de noviembre de 2012
Un antropólogo en el espacio
Hay momentos destacadìsimos de la mùsica producida en los años 70s, sobre todo en Inglaterra y "Olias of Sunhillow" del cantante de Yes, Jon Anderson, es uno de ellos.
Uno puede no comulgar con esa blandura, ingenuidad, optimismo y quizàs banalidad que nos propone aquì Jon: una cosa como fantasy/sci-fi y rock antropològico.
Los rockeros de lìnea dura lo condenaron (y condenan) por esa blandura; los amantes del rock sinfònico y el prog., por su virtuosimo escaso...
Aquì Anderson ejecuta muchìsimos intrumentos exòticos para el momento, con una simpleza cercana a la epifanìa, mezcàndolos con las texturas profundas y etèreas de los sintetizadores de Brian Gaylor y una percusiòn cercana en espìritu al conjuro tribal expuesto anteriormente por Mike Oldfield en su bellìsimo trabajo "Ommadawn".
La mùltiple conbinaciòn vocal (con una unicidad tìmbrica muy bien manejada y diferente del trabajo con Yes), es como siempre en este cantante, atractiva por la profundidad melòdica ,la expresividad y la emotividad del clima casi religioso y beatìfico de su onìrica forma de orquestar con las voces.
Resulta tambièn notorio, que èste disco fue producido justo en un momento durante el cual la industria del disco atravesaba una profunda crisis debida al problema con el petròleo suscitado en 1973 entre el mundo àrabe y los E.E.U.U..
Donde antes existiò una aparente confianza por parte de la industria hacia los mùsicos, apareciò de improviso la figura del màrketing que se impuso ante los productores con elocuencia de càlculos y proyecciones limitando su accionar econòmico en haras de un resultado màs inmediato, vasto y tendencioso en cuanto a formador de gustos.
La apuesta es aquì a contramano y el resultado: muchas bellas canciones engarzadas en una obra conceptual como un placentero viaje a mundos imaginarios recordado de forma muy vìvida.
Una apuesta diferente de evasiòn, màs cercana a la psicodelia que al espìritu primigenio del rock. Èste último fue recobrado paradòjicamente en esa època por el punk no muy lejos de allì, en el mismo lugar dirìa, en momentos en que la industria ordenaba un mensaje màs contundente; claro, nada volviò a ser lo mismo luego. Pero eso continua otro dìa...
Jon Anderson - Olias Of Sunhillow (1976)
01 - Ocean Song
02 - Meeting (Garden Of Geda) / Sound Out The Galleon
03 - Dance Of Ranyart / Olias (To Build The Moorglade)
04 - Qoquaq Ën Transic / Naon / Transic Tö
05 - Flight Of The Moorglade
06 - Solid Space
07 - Moon Ra / Chords / Song Of Search
MUSICOS
Jon Anderson: Voces, Guitarras, Harp, Sintetizadores, Percusión
Brian "It's Going Now" Gaylor – Electrónica, Sintetizadores
Ken Freeman: Cuerdas
FICHA TECNICA
Engineered by Mike Dunne
John Martin – Co-ordination, equipment, goodies
Mastered at RCA by Brian East
Recorded at Seer Green
Illustrated & Designed by Dave Roe
Art direction by Hipgnosis
Portrait – Jeff Cummings
Portrait colouring – Richard Manning
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